El reciente anuncio del gobierno de Javier Milei acerca del cierre de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) ha encendido las alarmas en la provincia de Santa Fe, donde la falta de mantenimiento de rutas ya es un problema crónico. En ese contexto, la aparición de un cartel de gran formato en la intersección de la Ruta Provincial 93 con la Ruta Nacional 33 vuelve a poner de manifiesto la necesidad de gestionar reparaciones urgentes.
En junio de 2023, un primer letrero —instalado entre Murphy y el acceso a la ruta 94— ya había denunciado el abandono de la traza. Hoy, un aviso casi idéntico reitera el mensaje: “¡Atención! Aquí empieza la Ruta Nacional 33 mantenida por el Estado Nacional”. Hasta el momento, no hay comunicación oficial que precise quién impulsa estas iniciativas ciudadanas ni en qué fechas exactas se colocaron los carteles.
La estructura y los permisos necesarios para su emplazamiento hacen poco creíble la hipótesis de un particular aislado. Más bien, estos recordatorios anónimos parecen responder a un reclamo colectivo por el progresivo deterioro del pavimento: baches de grandes dimensiones, señalización deficiente y banquinas erosionadas.
A la espera de la licitación prevista para el próximo año —sin fecha confirmada— que habilitará la contratación de un privado para las obras de reparación, el inminente cierre de la DNV supone una nueva incertidumbre. Si prospera la iniciativa oficial de eliminar o fusionar la entidad, la responsabilidad de conservar rutas nacionales podría recaer en las provincias o quedar en manos de convenios a definirse. Ello pondría en jaque los plazos de obra y los recursos disponibles, especialmente en corredores tan transitados como el de la Ruta 33.
Autoridades y usuarios insisten en evaluar alternativas viales que permitan sortear los tramos más afectados y reducir el riesgo de siniestros. Mientras tanto, la reiteración de los carteles anónimos destaca una verdad ineludible: la seguridad y la conectividad dependen de una administración clara y sostenida del mantenimiento vial. La provincia de Santa Fe, con su economía basada en el transporte de cargas y el turismo local, aguarda definiciones que garanticen la transitabilidad de sus caminos.
Foto: El Correo Digital de Firmat
