La diputada provincial Rosana Bellatti expresó su más enérgico repudio a las declaraciones del titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, quien en una reunión con Ian Moche -un niño autista de 12 años e incansable activista por la inclusión- y su madre, Marlene Spesso, afirmó: “La discapacidad no es problema del Estado”.
“Las palabras de Spagnuolo no solo son inaceptables, son la expresión brutal de una política de ajuste que está dejando a miles de personas con discapacidad fuera del sistema”, denunció Bellatti. “Frente a la emergencia en discapacidad, lo mínimo que debería ofrecer el Estado es empatía y presencia. En cambio, encontramos crueldad, desprecio y abandono”, agregó.
Las declaraciones del funcionario se suman a una serie de medidas que profundizan el desmantelamiento de derechos: congelamiento del Nomenclador Nacional, honorarios paralizados para médicos, acompañantes terapéuticos y transportistas, y auditorías masivas a pensiones no contributivas que están siendo utilizadas como herramienta de recorte, no de mejora.
“Las instituciones están al borde del cierre, las familias no pueden sostener los tratamientos, y mientras tanto se repite un discurso que criminaliza la discapacidad y responsabiliza a las víctimas por el ajuste”, señaló Bellatti.
La legisladora también recordó el antecedente reciente de una resolución oficial que incluyó términos ofensivos como “idiota”, “retardado” e “imbécil” para referirse a personas con discapacidad, un hecho que generó un amplio rechazo social y obligó al Gobierno nacional a retroceder, aunque sin asumir responsabilidad política.
“La discapacidad está en emergencia. No es solo un reclamo sectorial: es un llamado a la conciencia colectiva. Necesitamos ponerle un límite a tanta crueldad”, concluyó Bellatti.
