El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta de nivel amarillo por tormentas para la tarde y la noche de este jueves 20 de noviembre, que abarca a los departamentos de General López, Caseros, Constitución, San Lorenzo, Iriondo y Rosario y a buena parte de Santa Fe. La advertencia, actualizada a las 6:25, anticipa un escenario de inestabilidad con fenómenos que podrían presentar intensidad localmente fuerte, por lo cual las autoridades municipales reiteraron recomendaciones preventivas.
Según el organismo nacional, “el área será afectada por lluvias y tormentas de variada intensidad, algunas localmente fuertes”. El informe detalla que estos eventos podrían provocar abundante caída de agua en cortos lapsos, actividad eléctrica frecuente, ráfagas superiores a 75 kilómetros por hora y ocasional caída de granizo. Los valores de precipitación acumulada previstos oscilan entre 40 y 70 milímetros, aunque no se descartan registros superiores en sectores puntuales.

Recomendaciones ante el alerta
Frente a este escenario, se recomienda evitar la circulación durante la tormenta salvo situaciones de necesidad. También se solicita mantener especial precaución con los vehículos estacionados cerca de árboles, resguardar a los animales domésticos y no tocar columnas de alumbrado, cajas de luz o cables en la vía pública.
Entre las medidas preventivas, se recuerda:
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Sacar la basura únicamente en los horarios habituales de recolección.
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No depositar residuos fuera de cestos o contenedores para prevenir obstrucciones y anegamientos.
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Barrer las veredas y retirar de balcones y terrazas objetos que puedan ser desplazados por el viento.
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Mantener limpias terrazas, azoteas y patios; revisar canaletas y desagües.
Después de la tormenta: evitar criaderos de mosquitos
Una vez que cesen las lluvias, se recomienda reforzar las acciones para prevenir la proliferación del mosquito Aedes aegypti, transmisor de dengue, zika y chikungunya. Para ello es fundamental vaciar, limpiar y cepillar recipientes donde pueda acumularse agua. En lo posible, deben mantenerse boca abajo para impedir que funcionen como criaderos.
Las autoridades destacan que el cumplimiento de estas medidas contribuye a reducir riesgos y a minimizar los impactos de los fenómenos climáticos previstos bajo esta alerta amarilla.

